AEBOX/Gonzalo Campos/ — Gennady Golovkin y Saúl Canelo Alvarez, firmaron un combate nulo anoche en el T Mobile Arena de Las Vegas. A la finalización del combate la juez Adalaide Byrd puntuó 118-110 para “Canelo”, Dave Moretti 115-113 para Golovkin y Don Trella fue el que finalmente decidió el choque puntuando un empate a 114.
El boxeo es un deporte muy grande y anoche se volvió a demostrar una vez mas que las peleas que pide el aficionado son las que realmente cubren las expectativas y todo ello con un único secreto: Enfrentar a los mejores.
Dos estrategias muy distintas y definidas traían ambas esquinas a una pelea que dio inicio con Canelo muy bien posicionado pero cediendo el centro del anillo a un Golovkin que mostraba mucha cautela ante la pelea mas grande de su carrera y el mejor de todos sus rivales.
Con mucho respeto por parte de ambos deportistas pasaron los primeros cuatro asaltos que se anotaban dos a dos y que se decidían por detalles. El quinto y sexto han sido asaltos donde Golovkin aceleraba las acciones pero Canelo ha sabido anticiparse, bloquear con eficacia y contragolpear cuando lo ha necesitado saliendo por la izquierda con un paso lateral y eludiendo la derecha del kazajo una y otra vez por milímetros.
El séptimo ha sido un asalto que Golovkin necesitaba ganar y de paso testar a Canelo que aun perdiendo el asalto no se ha visto vulnerado. Pienso que a la fiscalización de los tres minutos, Canelo veía claro que si eso era todo lo que tenía Golovkin, no era suficiente para ganarle.
Octavo y noveno han sido la confirmación de que Canelo estaba disfrutando y tenia muy estudiado a Gennady. La anticipación con el jab y la velocidad en las contras estaban descomponiendo la única estrategia que traía el kazajo al que no recuerdo haber visto fallar tantas manos nunca.
El décimo se lo ha apuntado Golovkin por fe y por ganas de buscar pelea pero no por la eficacia de sus golpes que en ningún momento han llegado de manera preocupante a un concentradisimo Canelo Alvarez.
Undécimo y duodécimo han sido dos asaltos vibrantes en los que un impecable Canelo a la contra, ha desmontado una y otra vez la tela de araña de GGG, dando una autentica clase de boxeo técnico y apuntándose finalmente ambos asaltos. 116-112, a favor de Canelo es la puntuación que me sale al finalizar la suma.
Querer no siempre es poder si delante tienes a un boxeador tan inteligente, disciplinado y preciso como Saul «Canelo» Alvarez, al que anoche vi disfrutando de la pelea los últimos cinco asaltos, con la soltura del que tiene todo controlado con la exactitud de un reloj suizo. Pienso que Canelo ha sabido anular los recursos de un desconocido Golovkin al que no he visto trabajar el cuerpo, al que no he visto meter una sola «izquierda Chavez», al que no he visto cómodo en la larga ni colocar sus derechas descendentes, y al que si que he visto perder en la corta distancia contra un boxeador mas técnico y mucho mas rápido que él.
Pienso que si Mayweather ha ganado todas sus peleas a los puntos, ayer Canelo le hizo lo mismo a un Golovkin, al que si la pelea no se le pone frontal se le acaban los argumentos. Gennady Golovkin respetó anoche a Canelo como nunca le había visto respetar a un rival y de eso alguna culpa tendrá el de Jalisco.
La revancha de este multimillonario combate está servida, firmada, y la próxima primavera veremos la segunda entrega de una batalla que hace grande al boxeo porque posiblemente al leerme no esté en absoluto de acuerdo con mi opinión, pero es la única que tengo. Canelo se convirtió anoche en el mejor libra por libra del planeta dando comienzo a una nueva era, la de Saúl Canelo Alvarez.
