AEBOX/Gonzalo Campos/ — Las espadas en todo lo alto, así se encuentran las elecciones a la presidencia de la federación española encarando su recta de meta a la que los candidatos llegarán el Domingo cuando se reúna la asamblea y vote la persona que presidirá el boxeo español los próximos cuatro años. De mas está decir cual es mi candidato. Conozco a Martín Galán, se lo mucho que ha luchado y ha sufrido con una federación que heredó en la mas absoluta ruina pero que aceptó con toda la ilusión del mundo y que a día de hoy se encuentra en un estado de salud infinitamente mejor del que tenia cuando llegó, después de luchar contra todo, contra todos, y sin cobrar el sueldo que Felipe Martinez si que cobra de la federación española. Antonio Martín Galán no necesita ocho mil euros de la Federación porque su familia tiene negocios que generan ese dinero al día y porque es alguien que a diferencia de su oponente, no vive del boxeo. Felipe Miente, porque alguien que traiciona a quien le dio la oportunidad de participar en un proyecto tan ilusionante como en el que hemos estado inmersos, solo puede mentir y volver a mentir para sacudir sus vergüenzas.
El colmo de la desvergüenza es cuando presenta su programa electoral, «Plan Director», con la torpeza de que no solo copia el programa sino que fusila hasta el nombre del mismo que presentara Martín Galán hace aproximadamente dos meses en una reunión a la que fui invitado y en la que también se encontraban Javier Castillejo, Bartolome Torralba, (Federación País Vasco) Juan Tomás (Federación Canaria), Rafael De La Cruz, (Federación Castilla La Mancha) o Manuel Barquin, (Federación Cantabria) entre otros. En esta reunión, Martín Galán nos presentaba el entonces borrador del verdadero «Plan Director», y nos hacia participes de cualquier enmienda o recomendación que pudiéramos formular para darle contenido a un plan en que se estaba trabajando desde hacía meses, del que tengo copia y que ahora Felipe Martínez presenta como propio.
No es serio presentar como propio un programa electoral que ya presentara tu rival hace dos meses, ni tratar de engañar a la gente apropiándote de un plan en el que ha trabajado mucha gente y que posiblemente tu ni has leído. Para alguien que conozca un poco como funciona el boxeo español, las declaraciones de Felipe Martínez en una entrevista concedida ayer a otro medio especializado, solo pueden dar pena y provocar rechazo. Felipe miente una y otra vez sin vergüenza alguna y cometiendo error tras error en esta huida hacia delante en la que se comporta como un caballo en una cacharreria. Entiendo perfectamente que no te haya dado tiempo a preparar un programa dada la premura que requería la traición, pero a la presidencia de la Federación no se puede llegar mintiendo.
