Gennady Golovkin, manda al hospital a un valiente Kell Brook, que lo dio todo en una pelea muy desigual

AEBOX/Gonzalo Campos/ — Hasta bien entrada la madrugada tuve los ojos abiertos anoche para ver la pelea que preveía, tras conocer el cruce que nos proponían los promotores británicos para el O2 Arena de Londres.  El mejor e inexpugnable  peso medio del planeta, Gennady Golovkin, contra otra estrella del panorama internacional como el campeón  Welter ,Kell Brook, que llegaba como aspirante. El resultado fue el esperado. Cambio de golpe por golpe, demolición, y el preparador de Brook, Brendan Ingle, tirando la toalla en el quinto antes de que Golovkin infringiera un daño irreparable a su boxeador. ¡Gran esquina!

La pelea

La pelea fue como todas las del kazajo, aunque a mi me dejo dejó algunas dudas.  Brook, comenzó la pelea de frente y atacando a Golovkin donde nadie se atreve, en la distancia de los dolares. Ocupando el protagonismo del combate, dos manos de GGG, hacen tambalear a un Kell Brook, que terminó el asalto evitando la batalla. El segundo asalto nos traía el cambio de estrategia del británico y junto con el tercero, los momentos mas brillantes de Brook, que boxeando a la contra, recibió a Gennady con muy buenas manos que no hicieron ninguna gracia a un  campeón medio que asume demasiado castigo y confía en exceso en su mandíbula de acero. En una entrada  de ambos boxeadores, se produjo un choque de cabezas, el británico recibió un fuerte golpe en el pómulo, con la consiguiente brecha que terminó por descentrarle definitivamente.   Brillantes lances de Brook en segundo y tercero.

El cuarto comenzó con un Golovkin mas incisivo y consciente de que el cambio de mano por mano le beneficiaba. Kell Brook, continuó boxeando marcha atrás y girando en el sentido de las agujas, evitando la derecha del kazajo y sacando algunas series por dentro de autentico lujo como el gancho de derecha esperando la entrada del kazajo. Pero el aparente dolor que le producían los golpes en su pómulo y la acumulación de castigo en su integridad se iban haciendo presentes y por momentos nos mostraba a un Kell Brook mas frágil.

El quinto dio inicio como el anterior. Golovkin al ataque y Brook, en retirada parándose a poner sus series, pero GGG, contaba con mucha ventaja y el daño podía ser monumental. Golovkin acorrala a Brook en la esquina, le conecta uno, dos y tres, le persigue,, continua golpeandole y el entrenador de Brook, con muy buen criterio, se sube al ring con toalla en mano y da por finalizada la desigual contienda. Victoria de Gennady Golovkin por abandono en el quinto asalto. Golovkin me dejó muchas dudas en cuanto a su encaje. Pienso que en el momento en que se enfrente a un peso medio de categoría, lo van a poner en el suelo.

La otra historia

Nueva  pelea desigual y otro deportista al hospital. El hasta anoche invicto campeón welter británico, Kell Brook, fue trasladado al Hospital tras la pelea  donde se le diagnosticó fractura de pómulo derecho, y permanecerá en el centro hospitalario hasta el próximo lunes, si no surgen complicaciones.

Nos están vendiendo peleas del siglo que enfrentan a leyendas como Pacquiao y Maayweather, muy lejos de su mejor momento, o nos proponen choques desiguales donde la diferencia de peso entre los dos boxeadores es de mas de seis kg. Desde que se anunciara la pelea, la WBA, anunciaba, que autorizaba la defensa pero no permitía poner en juego su cinturón, aduciendo que la diferencia de peso entre ambos contendientes era excesiva.   Como nota de interés, recordar que Golovkin es campeón WBA,  desde  2010, que derrotará al colombiano Nilson Julio Tapia,  titulo del que Golovkin ha realizado 15 defensas ganando todas por Ko.

El resto de organismos con el WBC, a la cabeza, autorizó está desigual pelea, que nos la han vendido como si fuera la pelea del milenio y en realidad era el enfrentamiento entre uno de los pegadores mas terribles de la historia, contra un excelente campeón welter, seis kg, de peso inferior  a Golovkin. Brook es un welter, (66 kg) Golovkin es un medio, (72 kg) al que le cuesta dar el peso, por lo que no tengo ninguna duda de que la diferencia de peso en el ring, superaba los 8 kg, a favor de GGG.

Sin normas ni reglamentos

Sin normas ni reglamentos que cumplir y sin un horizonte de cordura y de justicia en este nuestro amado deporte, solo podemos perder el respeto del aficionado y ganarnos la critica destructiva con fundamentos. Hace años que los buenos no pelean con los buenos, que los equipos de los deportistas eligen a  árbitros y jueces, que los organismos autorizan todo aquello que se le ocurre a a cualquiera, como la época en que Pacman mataba de hambre a sus rivales.  El único motivo es degradar la profesión de boxeador profesional y  no renunciar a la tarjeta black,  de las que se benefician los presidentes de los organismos que son los que su dan su beneplácito a estas masacres deportivas, que yo ayer no disfruté y que me pareció un insulto a las reglas y valores mas elementales de nuestro deporte.

Este no es el boxeo que me enseñó a amar mi padre, aquel boxeo que enfrentaba a  Hagler con los mejores de su categoría hasta convertirse en 28 veces campeón del mundo, o a Chavez destruyendo a todos los grandes y convocando a mas de 100.000 espectadores en el Estadio Azteca del D.F. mexicano, en aquella noche histórica en la que por fin tapaba la boca de aquel excelente y charlatán  campeón como fue Greg Haugen.

Este no es el boxeo que a mi me gusta.