Izquierdazo/ — Pacquiao-Bradley3 no cumplió con las expectativas y ofreció un poco más de espectáculo de lo que se esperaba, aunque Manny Pacquiao -que regresó luego de once meses y una cirugía en el hombro derecho- dominó otra vez su combate con Tim Bradley, llevándose una decisión unánime de 116 a 110. La pelea tuvo sus momentos de intriga y la gente en el MGM Grand de Las Vegas despidió al filipino como lo que es: una gran leyenda en los libros del boxeo.
Los primeros episodios transcurrieron sin ningún sobresalto. El quinto round levantó a la gente de sus asientos porque hubo varios intercambios de golpes rápidos y peligrosos para ambos, aunque el filipino al final sacó la mejor parte.
Bradley cayó boca abajo cuando Pacquiao conectó un gancho de derecha durante el séptimo round. En la octava vuelta el californiano hizo trastabillar al filipino con un gancho de izquierda luego de fallar una combinación 1-2, la cual quiso repetir en el noveno pero se encontró con una mano de izquierda al contragolpe que lo lastimó y luego de otro golpe calcado se fue al suelo.
En un resumen, ‘Pacman’ dio algunos momentos que trasladaron a los aficionados unos años atrás: la inigualable velocidad de manos y pies, el ritmo siempre frenético, el 1-2 quizá más rápido que exista en el boxeo. Todas fueron fotografías que el filipino entregó en su tercera pelea con Bradley, un rival al cual ya había dominado en dos ocasiones anteriores. Así que el valor real del triunfo de esta noche solo lo saben Freddie Roach y el boxeador que le cambió la vida.
En la entrevista con Max Kellerman antes de cortar la transmisión de HBO, esto fue lo que dijo el púgil filipino:
Manny Pacquiao: «Esta pelea fue diferente porque soy un cristiano esta vez y soy más cuidadoso. Tengo un compromiso con mi familia de que me voy a retirar después de esto. Posiblemente disfrute el retiro, ayudar a la gente y servir a la gente. Gracias a todos las fanáticos del boxeo, especialmente a los filipinos. A todos los boxeadores, todos los peleadores.»
Al ser cuestionado sobre su sentir con la idea de tener a Canelo Álvarez como su próximo rival y luego enfrentar nuevamente a Floyd Mayweather, Pacquiao respondió: «Por eso amo a los fanáticos.»
