AEBOX/Manuel Barrero/ — El jueves por la noche el boxeo volvía a la capital de la mano del tándem formado por Fernando Sánchez y José Valenciano, con la colaboración del siempre presente Ricardo Sánchez Atocha. Lo hacía en un escenario poco habitual para el aficionado español. Y es que el vetusto y lujoso Hotel Wellington de Madrid sería el escenario de la velada, compuesta por tres combates profesionales y uno amateur femenino que haría las delicias del público menos habitual al deporte de las 16 cuerdas.
El evento, que estuvo amenizado por un magnífico cóctel y varios desfiles de moda entre combate y combate, comenzó con la disputa del único pleito amateur que enfrentó a Claudia Águeda y Patricia Martín, y que terminó con victoria por decisión unánime de la canaria y componente del equipo nacional. Lo consiguió no sin pasar por algún apuro en el primer asalto, el más cerrado de los tres, en el que una Claudia con toda la gasolina salió a mandar y consiguió imponer por momentos su boxeo. El segundo y tercero fueron otra historia, dominando Patricia Martín el combate en la distancia larga y mostrándose mucho más fresca y veloz en las acciones ofensivas frente a una rival a la que pronto se la acabó la gasolina.
JOSE OSADO VS RAFAEL CASTILLO
Se venía el primero de los tres combates profesionales, que enfrentaría a estos dos púgiles en la categoría del peso ligero en combate pactado a cuatro asaltos. Osado, con muchas ganas de ring tras la decepcionante renuncia de Chiky a disputar el Campeonato de Madrid el pasado mes de mayo, salió a por todas desde el primer tañido de la campana. Castillo quería mantener lejos a Osado con golpes rectos, pero el Madrileño, con buenos movimientos de cintura, lograba entrar en la corta para atacar con duros golpes al cuerpo del nicaragüense, que rápido sintió el poder de Osado y a poco más de 10 segundos para finalizar el primer asalto plantó la rodilla en la tarima.Comenzó el segundo y salió Osado con más decisión, dispuesto a acabar por la vía rápida, trabajando bien al cuerpo y repitiendo en numerosas ocasiones la combinación del hook al hígado para terminar con el crochet a la cabeza, que fueron minando a Castillo. Finalmente y con un Castillo abrumado por los golpes de Osado, el árbitro Jose Luis Serrano detuvo las hostilidades y dio por finalizado el combate. Paso delante de un Osado que está llamado a hacer grandes cosas en un futuro próximo.
BRIAN PELAEZ VS REINALDO MORA
Segundo combate de la noche el que disputaron el madrileño y el nicaragüense residente en Barcelona. Comenzó el primer asalto con un Brian tratando de dominar, con mayor iniciativa e imponiéndose con el jab, aunque con poca pegada que no incomodó a un tranquilo Reynaldo Mora, que bien armado se quitaba golpes sin mayor dificultad. Salió Mora al segundo con más decisión que en el primero, esperando Brian las entradas del nica con varios golpes por dentro a la contra que frenaban los ataques del de Barcelona. Puntuó Brian con varias derechas claras y apretó al final del asalto para dejar buenas sensaciones a los jueces. En el tercero se desató un Brian que con una técnica excelsa, provista de una buena gama de golpes, grandes desplazamientos e incluso cambios de guardia y ángulo, desarbolaron a un Reinaldo Mora que al menos lo intentó con valentía. Gran asalto de Brian a la contra para llevarse un asalto que llegó hasta el final por la falta de pegada de éste. El último no cambió nada el resultado, con un Mora que salió a jugársela sin éxito. Al final, triple puntuación de 40-36 y victoria por decisión unánime para Pelaez.
SAMUEL MUÑOZ VS JAVIER GILABERT
Comenzó el combate con mucho respeto entre ambos. Asalto de tanteo en el que los dos boxeadores se dedicaron a estudiar a su oponente, tratando de picar con el jab de izquierda y buscar el fallo del contrario, con mayor acierto de Samuel. El segundo fue distinto, en el que Gilabert le ganó la partida táctica a su oponente, ganando los tempos del combate y conectando más y mejor. Algo parecido a lo que ocurrió en el tercero, en el que Samuel sí que supo coger el centro del ring y trató de llevar la iniciativa pero sin demasiado acierto. Gilabert se sintió cómodo boxeando hacia atrás y volvió a poner en problemas a Samuel a la contra. En el último le pidieron a Samuel que echara el resto, y así lo hizo. Lo intentó hasta el final aunque Gilabert, bien tapado, blocó la mayor parte de los golpes. Al final, los jueces vieron ganador a Samuel, con puntuaciones de 39-38 y dos veces 39-37, resultado que a nuestro juicio no fue el más justo en un combate en el que creemos que el barcelonés mereció algo más.
