AEBOX/Gonzalo Campos/ — Mike Tyson y Roy Jones Jr. no decepcionaron en su regreso a la actividad y brindaron un buen espectáculo que finalmente era de lo que se trataba, de entretener al publico.
El Staples Center de Los Ángeles, volvió vestirse de gala para recibir a dos leyendas del pugilismo que marcaron época en su momento y que anoche lucieron muy bien físicamente pese a los mas de cien años de boxeo que acumulaban sus puños.
La exhibición comenzó, y enseguida, para descontento de los soñadores, se pudo comprobar que los dos deportistas tenían muy claro un guion que no era otro que el de disfrutar y no hacerse daño en un espectáculo en el que ambos ex-deportistas saldrían muy bien pagados.
Solo volver a ver caminar hacia el centro del ring al «Terror del Garden», ya compensaba el esfuerzo del pago por visión del evento. Tyson y Jones dejaron destellos que sumieron al aficionado en una maquina del tiempo, con acciones y golpes que hace años les convirtieron el el mejor boxeador libra por libra.
Además de no golpearse en la cabeza, a excepción algún golpe aislado, y de controlar siempre la potencia de los impactos, Tyson y Jones, dieron una de cal y otra de arena entre golpes al cuerpo y trabas, que utilizaban para descansar en mitad de cada asalto hasta llegar al octavo.
Los jueces, que fueron la ex-boxeadora Christy Martin, y los también ex-boxeadores Vinny Pazienza y Chad Dawson, ofrecieron unas puntuaciones de 79-73, 80-77 y 76-76, que finalmente era lo menos importante de una velada que volvió a mostrar al mundo la capacidad de atracción que tiene Mike Tyson sobre los medios informativos de todo el planeta.
Para todos aquellos aficionados que pensaban que tanto Mike como Roy iban a tratar de matarse sobre el ring, supondría una decepción, pero para todos los que sabían de que se trataba el evento entiendo que fue simpático ver a estos dos colosos de nuevo sobre un ring.