AEBOX/ Gonzalo Campos/ — El actual campeón gallo de la WBA e IBF ofreció anoche el último ejemplo de por qué muchos le consideran uno de los mejores púgiles del planeta, tras noquear en el tercer asalto al filipino Michael Dasmarinas. El japonés, logró derribar tres veces a su rival, la ultima de las cuales propició el final por Knocaut a los 2:45 del tercer asalto, en el The Theater at Virgin Hotels en Las Vegas.
Dasmarinas prometió revelar al mundo el verdadero significado de su apodo «caliente y picante» antes de su combate por el título de la IBF. Ese momento no llegó, ni tampoco le interesó intercambiar cuero con el peligroso Inoue, que dio repetidas vueltas al ring en el primer asalto. Inoue acortó distancias rápidamente, con un gancho de izquierda en el primer minuto y pasó el resto del asalto lanzando su jab con la esperanza de preparar sus golpes de poder.
En el último minuto del segundo asalto, Inoue logró derribar por primera vez a Dasmarinas. Un paralizante gancho de izquierda al hígado hizo que Dasmarinas se diera la vuelta y cayera a la lona, y aunque consiguió superar la cuenta y llegar hasta el final. se llevó algunos golpes mas al cuerpo que le hicieron retroceder maltrecho.
«Sólo quería ver lo que tenía y lo que podía aguantar en el primer asalto», dijo Inoue a Bernardo Osuna de ESPN. «Después de eso, confié en que podría liquidarlo».
Ese momento llegaría en el siguiente asalto, tras vapulear al filipino, que se llevó una golpiza mayuscula en tan solo tres asaltos.
Dasmarinas mostró poco interés en intercambiar con el potente Inoue, que continuó castigando al cuerpo. Cuando el retador intentó defenderse del ataque, Inoue llevó el ataque hacia arriba. Un uppercut de derecha del invicto púgil de 28 años fue eficaz para hacer que Dasmarinas levantara la guardia, preparando la oportunidad de conectar un golpe al cuerpo para enviar a Dasmarinas a la lona por segunda vez.
El árbitro Russell Mora llegó a la cuenta de nueve antes de que Dasmarinas se pusiera totalmente de pie y convenciera al tercer hombre de que podía continuar. Inoue pondría fin a esa idea, con otra puñalada de izquierda al cuerpo que hizo que el retador se retorciera de dolor antes de caer. La secuencia produjo el final de la pelea, con Inoue defendiendo con éxito sus títulos mundiales.
Inoue mejora a 21-0 (18KOs). Conectó 38 de 112 golpes totales (34%), incluyendo 31 de 48 golpes de poder (65%) según las estadísticas de Compubox. Dasmarinas se quedó muy corto en su primer intento de conquistar el título, al conectar sólo 12 de 80 golpes totales (15%), incluidos 10 de 40 golpes de potencia (25%). La derrota deja su récord en 30-3-1 (20KOs), poniendo fin a una racha de 13 victorias continuadas.
El zurdo de 28 años se abrió camino hacia el número uno de la IBF después de una victoria por decisión en 12 asaltos sobre Kenny Demecillo en marzo de 2019, aunque con la pandemia de coronavirus retrasando su oportunidad por el título.
En cuanto a Inoue, sigue defendiendo su nominación al mejor libra por libra del boxeo. La competencia en esa carrera para el ex campeón del peso minimosca, del supermosca, y actual titular del peso gallo unificado, es feroz. Como duros competidores, Saúl «Canelo» Álvarez (56-1-2, 38KOs) encabezando la mayoría de las listas, y los pesos welter Terence Crawford (37-0, 29KOs) y Errol Spence (27-0, 21KOs) rondando la cima, aunque algo por detrás de japonés y mexicano.
La victoria de anoche convierte el legado de Naoya Inoue en algo superlativo. El japonés disputó su primer titulo mundial en su sexta pelea, y desde entonces todas las siguientes han sido por titulo mundial y con victoria. Ahora el objetivo de Inoue es convertirse en el campeón indiscutible del peso gallo, un camino que tal vez sea más corto tras la noticia de que Nonito Donaire (41-6, 27KO) se enfrentará a John Riel Casimero (30-4, 21KO) en un combate de unificación de los títulos WBC y WBO, el próximo 14 de agosto.
