AEBOX/Alberto Lazo.
Comenzaba la tarde en Sevilla con un tiempo desapacible, pero esas son las mejores tardes para ver buen boxeo, en un pabellón digno de acoger cualquier título mundial de Europa o el campeonato de España anoche celebrado, el Palacio de los deportes de San Pablo se vistió de gala y se preparó para vivir su primera velada de boxeo.
El speaker se preparaba, las banderas encima del ring y una premisa en los dos boxeadores que les tocaba salir al ensogado, ser el nuevo monarca del peso ligero en España.
Salva Barón el primero en salir como visitante, su cara de concentración hacía presagiar que el combate sería una fiesta para el boxeo patrio, y llegó la hora de Carlos Pérez, su público lo animaba y todo el pabellón coreaba su nombre parecía la noche perfecta, pero Barón tenía en su mano torcer el combate a Ratón. Sonaba el himno cosa que se agradece y que no se debería perder.
Con el tañido de la campana ambos púgiles salían a dominar, aunque en vano para Barón quien veía que el primer asalto con un Ratón muy ordenado y con su recto de izquierda dominaba el asalto.
Segundo asalto que comenzaba igual pero ya con Salva más metido y no dejando escapar la oportunidad de hacer llegar sus manos en recto.
El tercero, cambiaron las tornas y Barón conecto las mejores manos, ganaba el asalto y hacia que Ratón se moviera para escapar de las embestidas.
Con el cuarto, el rey gitano, cogió confianza y fue haciendo un trabajo de demolición con crochets al rostro. Por su parte Ratón buscaba el cuerpo y ambos hacían vibrar al público.
El quinto se desarrollaba igual que el anterior, pero con una peculiaridad, el público veía a un Barón que convencía y que venía a dejarse todo.
En el sexto Barón con una buena mano sacaba el bucal a un Ratón que estaba cogiendo un segundo aire para encarar la recta final.
Y aquí venía el asalto más duro para el local, Ratón pasaba un mal momento y Barón lo tuvo en sus manos, si Ratón hubiera descuidado su preparación o Barón hubiese tenido dos semanas más a lo mejor este asalto habría acabado de otra manera, Carlos supo resistir y en ese momento el combate estaba más abierto.
Octavo de infarto con un Ratón moviéndose más y Barón buscando cazarle, en ese momento una parte de la grada fue desalojada por un desafortunado comentario étnico que no debería repetirse, al final el evento continuó y el combate se pudo desarrollar con normalidad en sus compases finales. El boxeo es un deporte noble que nada tiene que ver con la imagen que se vio, gracias al organizador que supo mediar para que la equivocada actuación de la grada de animación no fuera más.
Noveno muy activo, haciendo que el público no pudiera sentarse, asalto que pudo decantarse por detalles para Ratón.
Decimo y último, Salva sin dejar respirar a Ratón, ambos boxeadores lo daban todo haciendo que el público se levantara de sus asientos en un final de infarto, Barón casi sin gasolina, pero sin dar un paso atrás. Y
final del combate.
Íbamos al veredicto de los jueces y aquí he de decir que los árbitros de silla que puntuaron debieron ver otro combate al que vimos la prensa deportiva y gran parte de la afición, a dieciocho días de ser avisado y con el gran combate realizado, ganando bastantes asaltos no se puede minar la moral así con esas puntuaciones. 92-98, 97-93 y 99-91 cartulinas fuera de la realidad. A gran parte de los entendidos le daba un punto por encima para Carlos.
Ganador por decisión unánime y nuevo campeón de España del peso ligero, Carlos “Ratón” Pérez. Después de mucho lucharlo y de hacer un combate muy serio y bonito con un rival que no le regaló nada, el Ratón de Sevilla se hacía con la corona de campeón nacional. Ahora toca descansar y pensar, pero ayer el campeón lo tenía claro, su objetivo más inminente es Zeus de Armas. Desde esta redacción damos la enhorabuena al campeón y este título es más que merecido.
“Porque el boxeo es vida, viva el box”
