AEBOX/Vicente Campos/—-En el Gila River Arena, en Glendale, AZ, se enfrentaron anoche ex campeón mundial del peso Supermedio del CMB David “El Bandera Roja” Benavídez y el ex campeón del peso Medio de la FIB y clasificado número 2 del CMB David Lemieux, con quien acabó en el tercer asalto con el título mundial Supermedio interino del CMB en juego.
Cumplió su palabra el hijo predilecto de Phoenix, que fue muy superior al canadiense David Lemieux, al que derrotó por KO en el tercer asalto. Benavídez derribó a Lemieux al comienzo del segundo asalto y golpeó al ex campeón del peso Medio de la FIB antes de forzar una detención a las 1:31 del tercero.
En el primer asalto, Lemieux comenzó agresivo hasta que Benavídez lo arrinconó en el último minuto y le conectó una docena de golpes que no obtuvieron respuesta, lo que dio a pensar que el árbitro Harvey Dock podría parar las hostilidades cuando sonara la campana.
En el segundo asalto, Benavídez derribó a Lemieux con un gancho de izquierda en el mentón que obligaba al referi a hacerle la cuenta de 8 al canadiense. No pasó mucho tiempo antes de que “El Bandera Roja” aterrizara derechas al cuerpo e izquierdas a la cabeza.
Al final del asalto, el árbitro se acercó a la esquina de Lemieux y le advirtió que si no mostraba nada, detendría el combate y así fue.
El tercer asalto fue un monólogo por parte de Benavídez, lo que hizo que el árbitro cumpliera su palabra y diera la pelea por terminada acabando con el sufrimiento de Lemieux que ya no oponía ninguna resistencia. No obstante, la esquina de Lemieux había pedido al inspector del ring que subiera a la plataforma del ring y le hiciera una señal al árbitro para que detuviera la pelea
Una vez acabado el combate, Benavídez, dirigiéndose a su público, comentó:
“Solo quiero agradecer a todos los que vinieron esta noche. Si no fuera por mi gente de Arizona, no estaría aquí. Es surrealista para mí. Voy a dar mi corazón en el ring por todos ustedes todos los días”.
Sobre la pelea, dijo:
“Sabía que iba a estar abierto toda la noche. Conecté ese primer gancho de derecha al cuerpo y me sorprendió que llegara tan pronto. Pero seguí presionando. Me sorprendió que no detuvieran la pelea en ese primer asalto o que ni siquiera contaran hasta ocho. Así que seguí atacando”.
Y al referirse a su rival, comentó:
“Gracias a David Lemieux, que fue el único con las pelotas para subir al ring conmigo”.
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